Lhasa

Una de las cuentas pendientes que me quedo, es mencionar la triste, trisísima pérdida para la música. En el comienzo de este año (exactamente el primero de enero), falleció la cantautora canadiense-estadounidense-mejicana Lhasa de Sella. Provablemente una de las joyas más preciadas de la música de los últimos años. Y es que a sus jóvenes 37 años, Lhasa es víctima de un cancer de pecho, que la lleva a la muerte.
Como melómano declarado me parece prudente dedicar un espacio a su obra y memoria.
No hay mucho que decir. Una música influenciada por múltiples culturas, debido a su vida nómade. The Living road, a mi criterio su mejor trabajo, es el único disco en el que canta tanto en Español, como en Inglás, como en Francés, a diferencia de sus otros dos discos (Lhasa, del 2009, está cantado enteramente en inglés, y La llorona, su primer obra, está cantado enteramente en Español).
Ojalá que lo disfruten tanto como yo.

The Living Road













Hasta Siempre.



Hacer y no dejar hacer.

Hace mucho que no posteo (porque la gente no lee). Y peseron muchas cosas, tengo mucho de lo que hablar, pero me voy a dejar temas para futuros posts. Atengámonos a lo más importante.
Como TODOS sabrán, hace poco fue 24 de marzo, y se conmemoró la caída del gobierno militar. Sin embargo no quiero hablar ni de los dictadores, ni de los afectados. Se habla mucho de eso, y me parece que está bien que se hable. Mucha gente dice que la dictadura "ya pasó". ¡Yo creo que es una afirmación tremenda! El hecho de que el gobierno hoy en día esté regido por un sistema democrático no implica que los sucesos durante la época dictatorial deban darse por culminados. Todavía hay cosas por decir. Todavía hay treinta mil personas desaparecidas. Todavía hay cuerpos retenidos por militares. Todavía hay niños adoptados que no conocen su identidad. Nada está terminado. Pero lo que quiero abordar es otra cosa.
De lo que quiero hablar es de la gente que dice "ya fue". La misma gente gente que antes decía "no me meto". La misma gente que decía "por algo será". La misma gente que decía "yo no hice nada". Esa gente era la que alimentaba a la dictadura, lavándose las manos, desentendiéndose, mirando hacia el costado. Pueden llamarme reaccionario, pero la gente que no luchaba contra la dictadura, la alimentaba. Dejar morir es casi tan tremendo como matar. Es más, en cierto sentido es peor, porque esa gente intenta mantener la conciencia (¿las manos?) limpia. Esa gente asume un discurso creyéndose inocente de él.
Musicalmente se puede tildar a Piero fácilmente dentro de esta categoría. Es decir, como puede ser, que el autor que en los tempranos 70 hubiese escrito "para el pueblo lo que es del pueblo" después se halla volcado a la ideología hippie. ¿Cómo puede promover una ideología pacífica cuando se ignora lo que se hace con la paz y la libertad en las calles? Porque si realmente se quiere promover las paz, uno no puede ignorar la violencia, tiene que COMBATIRLA. Perdón, pero eso de dejar ser, en ese estado no funciona. Uno tiene que pelear por ser, y para que el resto sea. Sino, sucede lo que sucedió en los 60 en EEUU, se agarra a un grupo de reaccionarios y se los droga para que no puedan seguir luchando contra el gobierno. Se utiliza la liberación sexual como una cortina de humo para seguir permitiendo que el tío Johnson mande sus soldados a salvar a Vietnam (¿Irak?) de los Vietnamitas.
En fin, uno hace política, o deja que la hagan por uno, que es otra manera más de hacer política.


"Maldigo la poesía concebida como un lujo
cultural por los neutrales
que, lavándose las manos, se desentienden y evaden.
Maldigo la poesía de quien no toma partido hasta mancharse.

Hago mías las faltas. Siento en mí a cuantos sufren
y canto respirando.
Canto, y canto, y cantando más allá de mis penas
personales, me ensancho."
(La poesía es un arma cargada de futuro - Gabriel Celaya)